Un paseo por el Río Cuervo

Bonita mañana la del 4 de mayo. Buena temperatura, día soleado y buena compañía son los ingredientes básicos y necesarios para una jornada ideal en moto. En este caso me acompañan, Maribel, Chema, Ramón y Yoshire. Dos Varaderos y una Ktm forman el trío que se moverá por tierras manchegas y aragonesas descubriendo una de las zonas de nuestro país con más encanto. La sierra de Albarracín y el nacimiento del Rio Cuervo.

Primera parada, Alcocer. Parada técnica para desayunar en el restaurante Casa Goyo. Magníficas tostadas y dulces magdalenas de las que damos buena cuenta.

Continuamos camino ya hacia el Rio Cuervo. Fabuloso paraje que da lugar a su nacimiento y que en esta época es centro de peregrinación de cientos y cientos de turistas. A pesar del gentío tuvimos suerte y encontramos una mesa donde poder comer. Comida casera hecha con amor. Tras la comida y después de haber recogido todo lo que traíamos para dejar la mesa como si nadie hubiera estado allí, hicimos la visita de rigor a ese monumento natural por el que emana el agua dando lugar al Río Cuervo.

 Caídas y caídas de agua que fluyen de la montaña y que nos ofrecen un espectáculo visial  pocas veces igualado. Hicimos fotos, muchas fotos pero sólo pondré una pequeña muestra para no cansar. También, y con permiso de Ramón, pondré alguna de sus fotos, sobre todo de esas que tanto me gustan y que son las de las motos en marcha.

Tras la visita al nacimiento nos dirigimos hacia el pueblo de Griegos, ubicado en plena Sierra de Albarracín, donde nos esperaban Laura e Iván, propietarios de una maganífica casa rural con encanto y con historia.

Una casa, donde seguro que habrá que volver.

.... y fin. Hasta la próxima