Para este paseo disponía de todo el día. Con lo cual, carretera y manta por autovía hasta Riaza, luego ya por nacional hasta Ucero, punto de salida de excursiones hasta la ermita que se encuentra en el desfiladero y que dada la poca dificultad que hay para acceder a ella, se convierte en el destino de prácticamente todo el que va por la zona. Cuando llegué había bastante lío de coches pero una moto pasaba desapercibida y conseguí entrar en el parking que estaba hasta arriba de coches. Busqué una buena sombra y me dispuse a marchar hacia la ermita, como todo el mundo. Esto es más o menos lo que me encontré en este paseo.
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La carretera, como no podía ser de otra manera, comarcal y solitaria. Los cuatro coches que me encontré llevaban el mismo destino que yo. |
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Centinelas observándonos |
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Tupidos bosques que apenas dejaban pasar la luz |
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Habitantes autóctonos. O muy arriba o muy abajo. |
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LLegando a la ermita. Dicen que el verdadero paseo comienza aquí donde el desfiladero se estrecha y las paredes rocosas quierern subir al cielo. |
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La ermita. Por cierto, hay que pagar, no se cuánto, por entrar a visitarla. |
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De vuelta para casa paso por Burgo de Osma. Esta es una vista de su Iglesia. |
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También pasamos por Jadráque y su castillo. Como un gran vigía domina todo el valle. |
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Para que os hagáis una idea de dónde está ubicado. |
Y esto ha sido todo. Hasta la próxima.
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